Una de las etapas más crucial en el ciclo de la vida es cuando los individuos comienzan a forjar un plan de vida que los guiará hacia un proceso de autodescubrimiento. La adolescencia, en particular, a menudo marca el inicio de este proceso a través de la selección de una carrera. Muchos jóvenes, sin embargo, se embarcan en esta elección sin haber explorado ni comprendido plenamente sus intereses, preferencias y aspiraciones en la vida.
Las incertidumbres vocacionales acerca de qué carrera estudiar son un tema común en las consultas con psicólogos y psicopedagogos. Factores como la influencia del entorno social o familiar, las restricciones económicas y otros elementos, también ejercen un impacto significativo en los dilemas relacionados con la elección vocacional. En muchas ocasiones, estos factores conducen a que los estudiantes opten por carreras que no les satisfacen ni motivan, lo que, en última instancia, tiene un efecto adverso en su motivación, desempeño, autoestima, sentido de responsabilidad, autoeficacia, así como niveles de ansiedad, entre otros aspectos.
Descubrir la verdadera vocación a medida que uno desarrolla su identidad es un proceso que no siempre ocurre de manera inmediata. En ocasiones, se requiere la asistencia de un profesional que pueda ayudar a la persona a desvelar aspectos de sí misma que faciliten una elección vocacional adecuada, una elección que esté en armonía con sus habilidades y aspiraciones personales.